Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva

La Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva entrega sus Premios Jóvenes Investigadores destacando la “calidad” y el “ejemplo a seguir” de los galardonados

29/11/2021
 

La Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva ha hecho entrega de los Premios Jóvenes Investigadores de este año 2021 en un acto en el que se ha vuelto a la presencialidad y en el que Daniel Martín Sáez recogió su premio en la categoría de Letras, mientras que Ángela Gómez Arboledas, ganadora en la categoría de Ciencias, lo hizo de forma virtual desde California, en donde se encuentra actualmente trabajando y desde donde no ha podido desplazarse.

El secretario de la Academia, Antonio Sánchez Pajares, procedió a la lectura del acta de los premios, en la que se destacó los méritos de unos galardonados que agradecieron el reconocimiento, al tiempo que felicitaron a la Academia por continuar con esta convocatoria que hace “tan importante labor de impulso y divulgación de la investigación y la creación en todos sus ámbitos y que nos anima a seguir dedicándonos a lo que nos gusta”.

La galardonada en la categoría de Ciencias dedicó su “más sincero agradecimiento a la Academia, “no solo porque haya reconocido mi trabajo, sino por promover iniciativas como estos Premios, que son importantes para impulsar y promover la carrera investigadora de los jóvenes. Una tarea que no es fácil no sólo por el trabajo en sí, sino porque puede implicar incluso abandonar tu país, como ha sido mi caso”.

Ángela Gómez destacó que “hay pocos científicos en España, que se tienen que ir fuera, pero que son mundialmente reconocidos” e incidió en que iniciativas como estos Premios Jóvenes Investigadores “son las que a veces representan un importante estímulo para que no abandonemos la carrera investigadora”.

Por su parte, el galardonado en la categoría de Letras reivindicó el papel de la filosofía en la vida, una materia en peligro en los planes educativos actuales, advirtiendo de que, “el que se pregunta para qué sirve la filosofía ya está haciendo filosofía, que no es más que una búsqueda crítica de lo mejor”.

También consideró que “lo real debe estar al servicio de lo ideal y no al revés” para defender en este punto el “papel de las academias en su búsqueda de lo ideal, de la sabiduría, frente a la búsqueda de la realidad, del conocimiento, de la universidad”, de la que apuntó que, entre otras cuestiones, “busca separar las ciencias, de las letras y las artes, que son vasos comunicantes y la universidad no lo ha entendido”.

En este sentido, Daniel Martín aseguro “valorar más este premio que me dan libremente unos académicos, que el trabajo que en diferentes momentos me ha negado la universidad, porque me ayuda a seguir investigando, a seguir enseñando y a saber que siempre habrá académicos dispuestos a ayudar a los demás de forma desinteresada”.

El presidente de la Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva, Emilio Pascual, destacó que “el nivel y la calidad” de los participantes en los premios de este año, apuntando al “atrevimiento” como denominador común de los dos premiados y considerando que este “es la madre del conocimiento y uno de los factores que deben guiar a los jóvenes para hacer lo que les gusta”.

Emilio Pascual se mostró “encantado” por que los premiados, “que ya han hecho importantes cosas, sientan que este premio les impulsa a seguir trabajando en sus carreras de investigación.” Destacó, en este sentido, que la Academia “se siente como el premiador premiado porque estos jóvenes, que son un ejemplo a seguir y de un gran nivel, al recibir nuestros Premios prestigian a su vez a nuestra Institución”.

Enlace a la información sobre la entrega de los premios emitida por Canal Luz.

Previamente, Emilio Pascual pronunció la conferencia ‘El volcán de Cumbre Vieja, isla de La Palma, Canarias: respuestas a preguntas frecuentes’, en la que abordó la situación tras su viaje a la isla, a la que se desplazó para apreciar in situ los detalles de la erupción. Destacó en primer lugar que el vulcanismo “no es una rareza, sino un rasgo primordial de nuestro planeta, en el que a lo largo de su 4.600 millones de años de historia la actividad volcánica siempre ha desempeñado siempre un papel crucial”.

Tras mostrar un mapa con todos los volcanes que hoy desarrollan actividad en el mundo en zonas como Japón, Indonesia, Centroamérica, Etiopía o Italia, destacó que los cambios que se aprecian en el volcán de Cumbre Vieja, “aunque a veces espectaculares a los ojos del profano, vistos por un experto son menores, y habituales en cualquier erupción volcánica.

El presidente de la Academia destacó el trabajo de los expertos que predijeron la erupción del volcán con tan sólo 48 horas de error, lo cual constituye una historia de éxito. En cuanto al final de la erupción, señaló que también puede predecirse en base a ciertas evidencias, tales como el descenso significativo de la emisión de gases y otras. Por desgracia, señaló, no hay señales claras en ese sentido hasta hoy.

Sin embargo, después de comparar la duración del evento con la de otras erupciones históricas en La Palma, en las que en los últimos 500 años se han registrado duraciones de hasta cerca de 90 días, conjeturó que “aunque no puede excluirse ninguna posibilidad, a priori no hay evidencia de que esta erupción vaya a tener una duración significativamente mayor”.

En todo caso, recomendó finalmente “aprender de esta situación a convivir con el entorno y educar a la población para minimizar daños materiales y personales. Para ello es fundamental tener un mapa de riesgos basado en el mapa geológico de la isla, que es de buena calidad y que separa claramente una zona sur, en la cual el vulcanismo es habitual en tiempos históricos, de otra zona, la más septentrional, en la cual la manifestación volcánica más reciente tuvo lugar hace más de 400.000 años.”

En ese sentido distinguió tres conceptos: lo que no se puede hacer, esto es, controlar un proceso volcánico una vez ha comenzado; lo que no podemos permitirnos hacer, es decir, ignorar los riesgos por el solo hecho de que a escala humana tarden tiempo en representar un peligro concreto y, por último, lo que sí podemos hacer: planificar las actividades humanas de acuerdo con la certeza de que, más pronto o más tarde, el vulcanismo hará su aparición en las zonas de mayor riesgo.

Puedes ver aquí la conferencia completa ‘El volcán de Cumbre Vieja, isla de La Palma, Canarias: respuestas a preguntas frecuentes’

Los premiados

La ganadora de los Premios Jóvenes Investigadores en la categoría de Ciencias, Ángela Gómez Arboledas, nacida en Málaga en 1989, es licenciada en Biotecnología, con Máster y Doctorado en Biología Celular y Molecular por la Universidad de Málaga, en la que recientemente obtuvo el Premio Extraordinario de Doctorado. En el año 2012 se incorporó a NeuroAD, grupo de investigación liderado por la doctora Antonia Gutiérrez (catedrática de Biología Celular y Molecular de la Universidad de Málaga), con una larga y fructífera trayectoria en la investigación de la enfermedad de Alzheimer.

Como miembro del grupo de investigación NeuroAD, Ángela forma parte del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (Ibima) y del Centro de Investigación Biomédica en Red sobre Enfermedades Neurodegenerativas (Ciberned).

A lo largo de su trayectoria profesional, ha publicado numerosos artículos científicos en prestigiosas revistas de alto impacto en el área de las Neurociencias. De entre estos trabajos, destaca su publicación como primera autora en la revista internacional Glia, cuyos resultados demuestran la capacidad de las células astrogliales de eliminar contactos neuronales aberrantes en el contexto de la enfermedad de Alzheimer. Por estos resultados, recibió el premio Málaga de Investigación 2018 y el Premio de Investigación de la Universidad de Málaga en 2020, entre otros galardones. De manera paralela, sus resultados han sido presentados en más de 37 congresos científicos nacionales e internacionales.

Desde comienzos de 2020, Ángela trabaja en la Universidad de California en Irvine, donde ha obtenido una beca postdoctoral competitiva de tres años para desentrañar la relación del Sistema del complemento y la enfermedad de Alzheimer. Actualmente forma parte también del Proyecto internacional Model-AD, cuyo objetivo es desarrollar y caracterizar la nueva generación de modelos animales para la investigación de la enfermedad de Alzheimer.

Por su parte, el ganador de los Premios Jóvenes Investigadores en la categoría de Letras, Daniel Martín Sáez, nacido en Los Alcázares (Murcia) en 1988, es doctor en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid. Tras licenciarse en Filosofía y en Historia y Ciencias de la Música, hizo su tesis doctoral sobre el nacimiento de la ópera y su aportación a la Edad Moderna desde una perspectiva política, religiosa y académica. Para ello realizó dos estancias de investigación, una en el Departamento de Música de la Universidad de Princeton y otra en el Departamento de Estudios Humanísticos de la Universidad de Ferrara, siendo también becado por la Society for Seventeenth-Century Music.

Además, ha publicado una veintena de artículos en revistas especializadas de musicología, filosofía e historia como International Review of the Aesthetics and Sociology of Music, Resonancias, Anales del Instituto de Investigaciones Estéticas, Revista de Musicología, Anales del Seminario de Historia de la Filosofía, Per Musi. Scholarly Music Journal, El Futuro del Pasado, Opus, Diagonal. An Ibero-American Music Review y Agora, entre otras.

En ellos ha investigado asuntos tan diversos como la idea del diálogo interior, la idea de inspiración musical, la idea de barroco, la idea de ópera y la propia idea de filosofía. También ha publicado ediciones, artículos y capítulos de libro sobre filosofía de la música contemporánea, desde Theodor Adorno hasta James O. Young, pasando por Peter Kivy. Dentro de sus estudios sobre el nacimiento de la ópera, ha escrito artículos y capítulos sobre la metáfora del theatrum mundi en la Edad Moderna, las poéticas musicales del siglo XVII, la producción teatral del libretista Gabriello Chiabrera, la influencia del mito del nacimiento de la ópera en la historiografía del último siglo o la relación entre el caso Galileo y la ópera romana y florentina en el siglo XVII.

Daniel Martín Sáez también ha trabajado como editor y traductor, destacando su edición del libro de James O. Young, ‘Filosofía de la música. Respuestas a Peter Kivy’ (2017), que él mismo encargó al autor, y la contraducción del libro de ‘Eva Brann La música de la República. Ensayos sobre las conversaciones de Sócrates y los escritos de Platón’ (2015). Además, ha editado durante quince años la revista Sinfonía Virtual, forma parte del consejo de redacción de La Torre del Virrey y ha participado como revisor externo en diversas revistas especializadas.

Como docente, ha trabajado tanto en Filosofía como en Musicología. Tras su contrato como FPI en la Universidad Autónoma de Madrid, cuando fue profesor de Estética y Pensamiento Musical, ha trabajado en el Departamento de Música de la Universidad de Granada y en el Departamento de Filosofía de la Universidad de Oviedo, impartiendo asignaturas como Música y Escena, Metafísica, Corrientes Actuales de Filosofía, Ópera y Zarzuela o Música y Sociedad, entre otras, habiendo sido también profesor invitado en la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Valencia. Está acreditado como Profesor Contratado Doctor por la ANECA y pertenece al grupo de investigación “Música y poder: el teatro con música durante el reinado de Felipe V” (UAM).

La Academia

La Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva es una corporación de derecho público, constituida el 30 de noviembre de 1998, que tiene como principal objetivo promover y difundir la cultura en el entorno local y provincial, en todos sus campos: ciencias, artes y letras. Sus 22 académicos numerarios actuales provienen de muy diversos medios: Universidad, empresas, actividades artísticas, profesiones liberales y otras. Además de una dilatada experiencia en el ámbito de su dedicación profesional, todos ellos tienen como denominador común su interés por la cultura en sus más diversas manifestaciones. Las actividades de la Academia han abarcado hasta hoy muy diversos campos, incluidas conferencias, exposiciones artísticas, conciertos, premios, radiodifusión y otras.